El olfato de Lucas Fernández (Plató del Atlántico) ha permitido rescatar, con todos los honores, un canción que es algo más, El hombre del tiempo,compuesta por Jorge Morell y Ricardo Ceratto, interpretada por el trío Los Mismos y ganadora del III Festival de la Canción del Atlántico, celebrado en el remozado parque San Francisco (Puerto de la Cruz), en 1968. La final tuvo lugar el 20 de abril de aquel año.
Se han cumplido, por tanto, cincuenta años de aquella noche mágica para el grupo vallisoletano que también se llevó el segundo premio con Guitarras de mi pueblo, un tema compuesto por Fernando García Ramos y Pedro Guerra Cabrera, seguro que de mayor calidad que el triunfador pero de menor impacto promocional o comercial. La organización, según ha descubierto el historiador realejero Javier Lima Estévez, había limitado la participación a autores o editores latinos, valorándose la originalidad de la obra a presentar.
Pues se ha cumplido ya medio siglo de aquella interpretación a cargo del trío compuesto por Antonio Pérez Gutiérrez, Benjamín Santos Calonge y Elena Vázquez Minguela, artísticamente conocida por Helena Bianco. Ya habían saboreado el éxito en el Festival de Mallorca, con El puente. La discográfica Belter, con la que habían contratado, encontró un verdadero filón con Los Mismos que se disolvieron diez años después, en 1978. En 1996 reaparecieron, ahora con Guillermo en sustitución de Antonio.
El maestro Rafael Ibarbia dirigió la orquesta del Festival, compuesta por músicos y profesores tinerfeños, algunos pertenecientes a la Orquesta de Cámara de Canarias. El hombre del tiempo fue premiada con el ‘Peñón de oro’ y cien mil pesetas.
Medio siglo, pues, de una canción a ritmo de cumbia, divertida, pegadiza y convertida en una canción eterna. La canción de una promoción impagable que bendice el clima tinerfeño con su eslógan, seguro de sol. Un singular parte meteorológico que seguía los cánones de Mariano Medina. Hoy en día aún se escucha en cualquier parranda de amigos y en cualquier fiesta.
Esos cincuenta años merecían un reconocimiento destacado. De ahí, el olfato de Lucas Fernández, quien no solo otorgó uno de los premios ‘Taburiente’ de la Fundación Diario de Avisos, sino que logró que Helena Bianco y el grupo interpretara la canción en el Teatro Guimerá mientras el auditorio la seguía y coreaba con un estribillo inolvidable. El hombre del tiempo forever.”
